Datos generales
NOMBRE
Prueba de supresión con dexametasona nocturna a dosis bajas (1mg)
SINÓNIMOS
Cortisol tras Dexametasona
INTERÉS FISIOPATOLÓGICO
El síndrome de Cushing es una enfermedad endocrinológica cuyo diagnóstico sigue siendo un reto. Esto es debido a la naturaleza dinámica del eje corticotropo y a que es una patología relativamente rara que se presenta con unos signos clínicos que se superponen a los de otras enfermedades frecuentes en la población general (como son la obesidad, la diabetes, la hipertensión arterial, etc.) ya que puede presentarse con formas clínicas atípicas, con signos o síntomas aislados e incluso tener una presentación clínica cíclica.
Existen una serie de pruebas de despistaje encaminadas a demostrar la presencia de hipercortisolismo como son la determinación de la excreción de cortisol libre urinario en 24 horas, o la medida de cortisol libre salivar nocturno. Dentro de las pruebas de despistaje o de primera línea se incluye la prueba de frenación con dosis bajas de dexametasona que evalúa la integridad del eje hipotálamo-hipófiso-adrenal, en concreto el efecto de retroalimentación negativo ante una dosis externa de glucocorticoides.
En algunos casos puede ser necesario diferenciar el hipercortisolismo debido a un síndrome de Cushing de otros trastornos denominados pseudocushing que pueden cursar con alteraciones bioquímicas y clínicas similares (como por ejemplo los pacientes con alcoholismo crónico o depresión mayor). Para ello se realizan pruebas de frenación con Dexametasona asociadas a una estimulación con corticorelina (CRH)
Una vez se ha confirmado la presencia de síndrome de Cushing debe procederse a realizar pruebas para determinar la etiología del mismo, entre ellas la determinación de corticotropina (ACTH) plasmática y la prueba de frenación con dosis altas de Dexametasona. En los pacientes con síndrome de Cushing ACTH dependiente la realización de una prueba de cateterización selectiva de los senos petrosos permite asegurar que la producción de ACTH es hipofisaria.
Prueba dinámica
FUNDAMENTO E INDICACIONES
La administración de una dosis suprafisiológica de glucocorticoides suprime la secreción de ACTH y de cortisol en sujetos normales. En pacientes con síndrome de Cushing endógeno de cualquier etiología no se produce frenación tras una dosis baja del glucocorticoide sintético Dexametasona.
La Dexametasona no interfiere en la medida del cortisol sérico.
Esta prueba se utiliza en la evaluación inicial de la sospecha de síndrome de Cushing.
PROCEDIMIENTO
Prueba ambulatoria.
Administración de 1 mg de Dexametasona vía oral a las 23:00 horas y extracción de sangre al día siguiente entre las 08:00 y las 09:00 horas para determinar cortisol plasmático.
INTERPRETACIÓN
El punto de corte más utilizado para valorar el adecuado descenso del cortisol post-Dexametasona corresponde con un valor < 1,8 μg/dL (50 nmol/L), ya que alcanza una sensibilidad diagnóstica del 95% y una especificidad del 80%.
LIMITACIONES
Los resultados de la prueba pueden verse alterados por fármacos que afecten a la absorción o al metabolismo de la Dexametasona, como por ejemplo en pacientes en tratamiento crónico con algunos antiepilépticos, la rifampicina o en a casos de etilismo crónico. Estas substancias son inductores del sistema enzimático del citocromo P450 3A4 (CYP 3’A4) implicado en el metabolismo hepático de la Dexametasona dando lugar a una aceleración del mismo.
Los estrógenos y otros fármacos estimulan la síntesis hepática de la proteína de trasporte de cortisol (CBG) que dará lugar a un aumento en la concentración de cortisol sérico total. Hasta un 50% de las mujeres que toman anticonceptivos orales presentan resultados falsamente positivos en esta prueba. Se recomienda retirar los estrógenos orales 6 semanas antes de realizar la prueba. Por este mismo motivo no se recomienda para el diagnóstico de síndrome de Cushing en embarazadas.
EFECTOS SECUNDARIOS
Posible efecto secundario: hiperglucemia.
HOJA DE INFORMACIÓN AL PACIENTE